CREER O REVENTAR

Ambito, Viernes 28 de Setiembre de 2007
Carrió se divorcia de socialistas
Elisa Carrió se abocará el fin de semana a una campaña conflictiva en el interior del país, donde decidió rechazar la adhesión del socialismo a su candidatura, tanto en Córdoba como en Mendoza, a pesar de integrar la fórmula con el titular del PS, Rubén Giustiniani. Carrió estará el fin de semana en Mendoza y deberá aclarar que en esa provincia no le dará apoyo al ARI, el partido que fundara y al que luego se desafilió. Pero, además, el conflicto político le impedirá a Giustiniani darles apoyo a las boletas de su Partido Socialista. Esa división es producto de la puja que mantienen en Mendoza el ARI y la Coalición Cívica, el nuevo sello partidario de Carrió, quien dará en cambio apoyo a Luis Leiva como candidato a gobernador. El conflicto llegó a tal punto, que los representantes de la Coalición Cívica presentaron ante la Justicia un escrito aclarando que la lista que podrá adherir a la candidatura presidencial de Carrió es únicamentela de Leiva. Pero, desde el ARI mendocino entienden que la presentación judicial es para que no lleven el membrete de la CC y que sí llevarán la fórmula a riesgo que puedan impugnarla en los comicios. Al vencer el plazo para la presentación de candidaturas en la provincia los que más presionan son los socialistas, convencidos hasta la semana pasada del apoyo de la dupla presidencial. Un conflicto parecido se presentó también en Córdoba, donde la Junta Ejecutiva Provincial del Partido Socialista expresó su «profundo rechazo a la actitud antidemocrática de Elisa Carrió» por impedir que lleven la boleta con la fórmula Carrió-Giustiniani. Los socialistas cordobeses retiraron la lista de candidatos a diputados nacionales y exclamaron que «es increíble que el presidente del PS, Giustiniani, sea candidato a vicepresidente de la Nación y su propio partido en la provincia no pueda llevarlo en la boleta. No encontramos otra explicación más que una lisa y llana proscripción impulsada por Carrió y avalada por Giustiniani». «Carrió y Giustiniani se muestran como los abanderados en la defensa de la institucionalidad democrática, pero no la respetan ni siquiera dentro de su propio partido. Nunca nos imaginamos una actitud tan fascista», sostuvo el presidente del PS en Córdoba, Eduardo Cañas, que dejó a los afiliados en «libertad de acción».