El sector K se afianzó como línea interna del PS
Sin contar con ningún miembro entre los siete integrantes en la junta electoral que debería garantizar la ecuanimidad del proceso eleccionario —toda la junta electoral estuvo en manos de la lista ganadora de Rubén Giustinini—, la lista opositora al oficialismo socialista encabezada por Jorge Rivas aseguraba ayer haber obtenido un despliegue como línea interna en varias provincias argentinas. Con una elección pareja en el segundo distrito nacional en cantidad de afiliados, la provincia de Buenos Aires, y ganando en las provincias de Santa Cruz, Corrientes y La Rioja.
Aun con datos provisorios, anoche analizaban en las oficinas de Jorge Rivas con moderado optimismo el resultado de la votación. “Lo normal fue que levantaran mesas de votación, eliminaran gente del padrón o cambiaran a último momento el lugar de votación de los afiliados. Yo votaba en Tapiales (localidad bonaerense pegada a la Capital Federal), pero cuando llegué al lugar me entero de que me tocaba votar en Virrey del Pino, una localidad en el extremo de La Matanza, a 25 kilómetros de la General Paz. Terminé votando a las tres de la tarde”, comentó Oscar González, ex secretario general del partido.
Lo que Néstor Kircher le ofreció al peronismo anti K ( integrar la junta electoral y participar en una interna del Frente para la Victoria) no le fue concedido a la oposición que encabeza Jorge Rivas dentro del Partido Socialista (PS). El acercamiento político al kirchnerismo del sector opositor al oficialismo socialista violentó el vínculo interno en el partido de la rosa ya desde 2007. “Estos son los peores”, fue la frase con la que el sector de Giustiniani condenó al kirchnerismo desde el momento en que se inició la etapa actual, en 2003. Y cuando vio simpatías kirchnerista dentro de su propio partido, les dio combate.
Desde esa caracterización, la conducción del PS elaboró un sistema de alianzas hacia la centro-derecha que atravesó exitosamente la elección de 2007, multiplicando votos tras la figura de Elisa Carrió. La misma que luego votó, por caso, en contra de la extracción de muestras de ADN para verificar la identidad de bebés robados durante la dictadura, o, más recientemente, negó el apoyo al matrimonio entre personas del mismo sexo, un proyecto de cuño socialista.
“¿Peores que el menemismo?”, quiso saber este cronista, “estos son los peores”, fue la respuesta a la repregunta. La definición se inscribe en una curiosa, antigua, pero vigente tesis que de sectores antiperonistas con arraigo en las clases medias urbanas: el peronismo, en general, tendría una estatura ética inferior a la media de la política nacional, y el kirchnerismo, sería una derivación demoníaca del peronismo.
Según distintos miembros de la lista minoritaria que encabezó Rivas, habrían logrado incorporar algunos integrantes al comité ejecutivo del partido, integrado por 25 miembros, aunque al cierre de esta edición no había precisiones sobre el número. Los cargos se ocupan por proporcionalidad (sistema D’Hont).
El futuro del PS continúa incierto. De todos modos, González sintetizó: “Seguimos dentro del partido bregando por conformar una organización plural y de izquierda democrática, lejos de cualquier alianza de derecha”.