Binner más Carrió,la apuesta opositora
Buscan que ambos puedan convivir en el flamante espacio. No hay lugar para Macri.
Por: Santiago Fioriti/Clarin
No lo dicen pero lo piensan. No es casual que la mayoría de los legisladores que componen el flamante espacio -aún sin nombre- provenga de la Coalición Cívica, la UCR, el ARI y el socialismo. Los cordobeses Luis Juez y Mario Negri, hasta octubre enemigos y hoy aliados más por espanto que por amor, buscan que en el armado opositor que nació en San Francisco puedan convivir dos referentes poderosos pero con una relación oscilante entre sí: la ex candidata a presidente Elisa Carrió y el gobernador de Santa Fe, Hermes Binner."No doy nombres. Hay que ir despacito, despacito", dijo Juez a Clarín, un día después de ponerse al frente de una cumbre de 44 diputados y senadores de Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba, que contó con la presencia de unos 100 productores agropecuarios descontentos con la política kirchnerista. Juez no brinda nombres, pero deja correr algunas pistas: "La oposición se tiene que dejar de histeriquear. Pero no vamos a hacer un rejuntado. Eso sería funcional a los intereses del Gobierno".Los líderes del grupo opositor de la región centro del país buscan correr a Cristina Kirchner por el lado que más les duele a los K. Es decir, pugnarán por armar un frente opositor con tinte de centroizquierda. No habrá lugar para Propuesta Republicana, el partido de Mauricio Macri, ni aceptarán dirigentes que provengan del menemismo y del duhaldismo. Al menos, es lo que prometen.En el decálogo de los cordobeses, que se pusieron al frente de la primera movida opositora después de la ruptura entre el campo y el oficialismo, se intentará poner límites, aun a costa de verse obligados a que la construcción sea más lenta y de enfrentar a un Gobierno elegido en las urnas hace menos de seis meses. El avance será lento, aunque, parece, constante: la segunda presentación ya está en marcha. Se hará en alguna ciudad o pueblo santafesino conocido por su producción agropecuaria. Allí esperan sumar diputados de otras regiones y enviarle un nuevo guiño a los sectores agrarios.En algo los asiste la razón: la reunión en San Francisco podría haber adquirido mayor relieve mediático si hubieran permitido que llegaran dirigentes con caras más conocidas. El ex candidato a gobernador del macrismo, Francisco De Narváez y el diputado Federico Pinedo, ya preparados para viajar en el avión del empresario, suspendieron el vuelo cuando avizoraron que no iban a ser bienvenidos.Las señales hacia Carrió y Binner son elocuentes, pero sus apellidos apenas fueron pronunciados un par de ocasiones por los disertantes que se reunieron en el "Salón de los buenos amigos" de San Francisco. "Sabemos que tienen diferencias, pero ideológicamente se sienten cercanos. No hay que olvidarse que Carrió integró la fórmula con un socialista compañero de Binner", razonan cerca de Negri.El radical compartió en octubre la boleta con Carrió y Juez se reconoce amigo y admirador de Binner. Pero ninguno moverá las fichas para juntarlos. El as que guardan para esa movida se llama Rubén Giustiniani, el postulante a vicepresidente de Carrió, que preside el PS. Giustiniani lo sabe pero, por ahora, no hizo siquiera un amague.