¿Cómo es la cosa?
En Rosario si, en el país no
El intendente Miguel Lifschitz envió ayer un mensaje al Concejo Municipal para que se le delegue la facultad de aumentar las tarifas de colectivos, taxis y remises, sin contar con la aprobación del cuerpo.
Según explicó el secretario de Servicios Públicos, Gustavo Leone, la revisión de los costos se haría cada seis meses, incrementándose automáticamente si el desfasaje es de un 10 por ciento. El envío del expediente 174.934 cayó como un balde de agua fría para los concejales opositores, que de inmediato lo calificaron como los "superpoderes". En diálogo con Rosario/12, la concejala justicialista María Eugenia Bielsa dijo que "si el intendente manda sus facultades para fijar la tasa, el Concejo podría cerrarse". Se aprobaría en la sesión del próximo jueves.
Sorprendidos e indignados, los concejales opositores no ocultaron su bronca por el mensaje enviado por el intendente, que pretende incrementar las tarifas del transporte público, facultad que la ley Orgánica de Municipios le otorga al Concejo. Bielsa dijo que "lo único que faltaría es que la semana que viene el intendente mande sus facultades para fijar la tasa, y entonces el Concejo podría cerrarse".
Según Bielsa, "con este esquema, el intendente puede subirle a los rosarinos cada vez que lo desee un servicio esencial como el transporte público. Nosotros no estamos dispuestos a delegar esta función, y nos pone mucho más seguros que debemos tratar de evitar que el socialismo tenga la mayoría automática en el Concejo".
Por su parte el concejal justicialista Osvaldo Miatello, que además integra el directorio del Ente de Transporte (ETR), señaló que el mensaje enviado por el Ejecutivo "es un pedido de autorización amplísimo que incluye taxis, remises, y colectivos, sin límites de tiempo. Es absolutamente desafortunado el pedido del intendente. Nosotros no podemos delegar las atribuciones, porque la ley orgánica de municipalidades nos otorga como un deber, el fijar la tarifa del transporte". (Rosario 12)