"El Frente Progresista no funciona como
una real coalición de partidos"
una real coalición de partidos"
Por Walter Palena / La Capital
El mal clima que existe entre los partidos que integran el Frente Progresista de Santa Fe se potenció esta semana con las declaraciones cruzadas entre Hermes Binner y Elisa Carrió. El diputado provincial de la Coalición Cívica-ARI, Pablo Javkin, cree que algunos dirigentes, incluido el gobernador, tienen por deporte atacar los rasgos personales de Lilita para sobresalir con algún título en la prensa. También remarcó la dificultad que existe en ser parte de una coalición de gobierno en la provincia y que esa expresión no tenga el mismo correlato a nivel nacional.
Otro punto de desacuerdo de Javkin con el socialismo está dado en torno a la autonomía municipal por ley, con media sanción en el Senado santafesino. El diputado de la CC-ARI se mostró a favor de votar en Diputados esa iniciativa, por lo que va a proponer en el seno del Frente Progresista impulsar el proyecto que en su momento envió Binner a la Legislatura.
—¿Cómo cayó hacia adentro del Frente Progresista el entredicho entre Carrió y Binner?
—Se debe tener una misma relación y estrategia a nivel nacional y provincial. Hay que tener un respeto por los líderes nacionales de los distintos espacios, porque la política es una en ese sentido.
—¿Hay algún reproche hacia Carrió?
—No, no. Está claro que lo que hizo Lilita fue contestar un comentario de Binner, en relación a una posible fórmula con ella, cuestión que no habíamos planteado nosotros. Cuando se hacen declaraciones, hay que estar atentos a preservar la consistencia de las fuerzas que integramos el Frente Progresista. Nosotros aportamos al Frente a nivel provincial, con los matices y diferencias que podamos tener, y tratamos a nivel nacional de consolidar el Acuerdo Cívico. Lo que no se puede sostener o plantear una acompañamiento a nivel provincial y no tener la misma coherencia a nivel nacional.
—¿Se sienten destratados por el socialismo?
—No por el socialismo, sí por algunos dirigentes del partido y de otras figuras aliadas que han tomado la costumbre de denostar a Carrió.
—¿Cuál es el sentido de esos ataques?
—No sé, será por algunas competencia en el espacio nacional. El ejemplo más claro es la actitud de Stolbizer. Las diferencias políticas siempre son entendibles y hay que saldarlas, pero hay ataques personales que no se condicen con eso. Me parece un gran error dedicarle tanto tiempo a expresiones en función al carácter de determinadas personas. Creo que la política de define por otro tipo de razones y no por cuestionamientos a la personalidad de tal dirigente.
—¿Estos episodios ponen en riesgo el armado del Acuerdo Cívico para el 2011?
—La tarea del Acuerdo Cívico es construir una alternativa política que pueda confrontar electoralmente al kirchnerismo. Repito: hay que salir de la discusión del carácter o no de determinadas personas y empezar a discutir en serio un programa, y a solidificar una coalición. Lo mismo creo para el Frente Progresista. La experiencia de las alianzas electorales no han sido buenas a la hora de gestionar y parece que el Frente tiene que salir de ser solamente un acuerdo entre partidos y constituirse como una coalición política en serio, que todavía no lo es.
—Pero hace tres años que están gobernando la provincia...
—Bueno, pero en esto hay que ser sinceros. El Frente Progresista no funciona como una coalición de partidos. Sacando el bloque de Diputados, que tiene un mecanismo de funcionamiento semanal, no hay ninguna otra instancia política del Frente que funcione efectivamente. Está constituida una mesa del Frente, pero se reúne muy poco. Es, si se quiere, una coalición en términos legislativos.
—¿Cuál va a ser tu posición con la autonomía municipal cuando llegue a Diputados?
—Nosotros, en conjunto con todas las fuerzas del Frente Progresista, durante años peleamos muchísimo por la autonomía municipal. Sobre todo los que participamos de la política en Rosario, donde hemos convocados a sectores sociales, empresariales. Hicimos foros, diversos planteos públicos. Es evidente que lo ideal sería tener una reforma de la Constitución y tenemos la alternativa de aprobar la autonomía por ley mientras juntamos el consenso para eso. Es dar un paso, que no es completo, pero es una parte importante.
—El socialismo no quiere saber nada con esto.
—A principios de año, el gobernador envió un mensaje a la Legislatura con un proyecto de ley de autonomía, con lo cual a mí me sorprende cuando se dice, como Lifschitz, que la autonomía por ley no sirve. Lo que yo voy a proponer en el Frente es que votemos la autonomía por ley en base al mensaje del gobernador.
—¿En qué difiere del proyecto aprobado en el Senado?
—Tiene algunas diferencias, pero es importante que privilegiamos el proyecto del gobernador. Ojala el peronismo lo apoye y que tengamos en Rosario una convención estatuyente lo más rápido posible. Creo que este es el límite donde la política tiene que ser sincera con la gente. Si nosotros estuvimos durante muchos años peleando por la autonomía, no puede ser que por la especulación de alguien en relación si conviene o no tener elecciones este año en Rosario, nos perdamos la oportunidad histórica de tener un avance.
—Si el socialismo y la UCR no aceptan votar eso, ¿cuál va a ser tu posición en el recinto?
—No estoy solo en esta postura. Va a ser muy difícil explicar que si tuvimos en febrero un proyecto de autonomía por ley enviado por Binner, ahora no lo querramos votar. Hay que aclarar que esto es incompleto, pero hay que votarlo, porque es un avance.
—Cuando Carrió dice “no queremos volver a la Alianza”, ¿se refiere a que tienen que acordar con un sector del peronismo?
—Más que apuntar a una alianza específica con algún sector, nosotros tenemos que construir una coalición en condiciones de gobernar. Nuestra mayor responsabilidad no es ganar una elección, porque ya lo demostramos, sino estar en condiciones de desarrollar una tarea de gobierno, independientemente de quienes sean los candidatos.
El mal clima que existe entre los partidos que integran el Frente Progresista de Santa Fe se potenció esta semana con las declaraciones cruzadas entre Hermes Binner y Elisa Carrió. El diputado provincial de la Coalición Cívica-ARI, Pablo Javkin, cree que algunos dirigentes, incluido el gobernador, tienen por deporte atacar los rasgos personales de Lilita para sobresalir con algún título en la prensa. También remarcó la dificultad que existe en ser parte de una coalición de gobierno en la provincia y que esa expresión no tenga el mismo correlato a nivel nacional.
Otro punto de desacuerdo de Javkin con el socialismo está dado en torno a la autonomía municipal por ley, con media sanción en el Senado santafesino. El diputado de la CC-ARI se mostró a favor de votar en Diputados esa iniciativa, por lo que va a proponer en el seno del Frente Progresista impulsar el proyecto que en su momento envió Binner a la Legislatura.
—¿Cómo cayó hacia adentro del Frente Progresista el entredicho entre Carrió y Binner?
—Se debe tener una misma relación y estrategia a nivel nacional y provincial. Hay que tener un respeto por los líderes nacionales de los distintos espacios, porque la política es una en ese sentido.
—¿Hay algún reproche hacia Carrió?
—No, no. Está claro que lo que hizo Lilita fue contestar un comentario de Binner, en relación a una posible fórmula con ella, cuestión que no habíamos planteado nosotros. Cuando se hacen declaraciones, hay que estar atentos a preservar la consistencia de las fuerzas que integramos el Frente Progresista. Nosotros aportamos al Frente a nivel provincial, con los matices y diferencias que podamos tener, y tratamos a nivel nacional de consolidar el Acuerdo Cívico. Lo que no se puede sostener o plantear una acompañamiento a nivel provincial y no tener la misma coherencia a nivel nacional.
—¿Se sienten destratados por el socialismo?
—No por el socialismo, sí por algunos dirigentes del partido y de otras figuras aliadas que han tomado la costumbre de denostar a Carrió.
—¿Cuál es el sentido de esos ataques?
—No sé, será por algunas competencia en el espacio nacional. El ejemplo más claro es la actitud de Stolbizer. Las diferencias políticas siempre son entendibles y hay que saldarlas, pero hay ataques personales que no se condicen con eso. Me parece un gran error dedicarle tanto tiempo a expresiones en función al carácter de determinadas personas. Creo que la política de define por otro tipo de razones y no por cuestionamientos a la personalidad de tal dirigente.
—¿Estos episodios ponen en riesgo el armado del Acuerdo Cívico para el 2011?
—La tarea del Acuerdo Cívico es construir una alternativa política que pueda confrontar electoralmente al kirchnerismo. Repito: hay que salir de la discusión del carácter o no de determinadas personas y empezar a discutir en serio un programa, y a solidificar una coalición. Lo mismo creo para el Frente Progresista. La experiencia de las alianzas electorales no han sido buenas a la hora de gestionar y parece que el Frente tiene que salir de ser solamente un acuerdo entre partidos y constituirse como una coalición política en serio, que todavía no lo es.
—Pero hace tres años que están gobernando la provincia...
—Bueno, pero en esto hay que ser sinceros. El Frente Progresista no funciona como una coalición de partidos. Sacando el bloque de Diputados, que tiene un mecanismo de funcionamiento semanal, no hay ninguna otra instancia política del Frente que funcione efectivamente. Está constituida una mesa del Frente, pero se reúne muy poco. Es, si se quiere, una coalición en términos legislativos.
—¿Cuál va a ser tu posición con la autonomía municipal cuando llegue a Diputados?
—Nosotros, en conjunto con todas las fuerzas del Frente Progresista, durante años peleamos muchísimo por la autonomía municipal. Sobre todo los que participamos de la política en Rosario, donde hemos convocados a sectores sociales, empresariales. Hicimos foros, diversos planteos públicos. Es evidente que lo ideal sería tener una reforma de la Constitución y tenemos la alternativa de aprobar la autonomía por ley mientras juntamos el consenso para eso. Es dar un paso, que no es completo, pero es una parte importante.
—El socialismo no quiere saber nada con esto.
—A principios de año, el gobernador envió un mensaje a la Legislatura con un proyecto de ley de autonomía, con lo cual a mí me sorprende cuando se dice, como Lifschitz, que la autonomía por ley no sirve. Lo que yo voy a proponer en el Frente es que votemos la autonomía por ley en base al mensaje del gobernador.
—¿En qué difiere del proyecto aprobado en el Senado?
—Tiene algunas diferencias, pero es importante que privilegiamos el proyecto del gobernador. Ojala el peronismo lo apoye y que tengamos en Rosario una convención estatuyente lo más rápido posible. Creo que este es el límite donde la política tiene que ser sincera con la gente. Si nosotros estuvimos durante muchos años peleando por la autonomía, no puede ser que por la especulación de alguien en relación si conviene o no tener elecciones este año en Rosario, nos perdamos la oportunidad histórica de tener un avance.
—Si el socialismo y la UCR no aceptan votar eso, ¿cuál va a ser tu posición en el recinto?
—No estoy solo en esta postura. Va a ser muy difícil explicar que si tuvimos en febrero un proyecto de autonomía por ley enviado por Binner, ahora no lo querramos votar. Hay que aclarar que esto es incompleto, pero hay que votarlo, porque es un avance.
—Cuando Carrió dice “no queremos volver a la Alianza”, ¿se refiere a que tienen que acordar con un sector del peronismo?
—Más que apuntar a una alianza específica con algún sector, nosotros tenemos que construir una coalición en condiciones de gobernar. Nuestra mayor responsabilidad no es ganar una elección, porque ya lo demostramos, sino estar en condiciones de desarrollar una tarea de gobierno, independientemente de quienes sean los candidatos.
